La casa es una antigua masia acabada de restaurar en el año 2005. La restauración se ha hecho con materiales originales del entorno. Durante la rehabilitación se han mantenido todos los elementos característicos de la arquitectura rural catalana.
El resultado es una encantadora y tranquila casa rural, para disfrutar de la naturaleza y de un entorno incomparable, con todas las comodidas a las que todos estamos acostumbrados. Calefacción en todas las estancias, agua caliente, doble cristal, lavavajillas, televisión, zona ajardinada con barbacoa, aparcamiento cubierto...
La casa consta de una planta baja y de un alojamiento independiente.
En la planta baja, donde antes se encontraban las cuadras de los animales, se halla una sala de lectura, una bodega y una sala de estar para tertulias y juegos, con una confortable chimenea situada en el antiguo refugio en tiempos de guerra.
En la segunda planta hay un alojamiento de 100 m cuadrados con capacidad máxima para diez personas, compuesto por dos habitaciones de matrimonio, una habitación de dos camas y una habitación para niños. Se encuentran también dos cocinas totalmente equipadas con vitrocerámica y lavavajillas, un gran comedor y una tranquila sala de estar con chimenea. Todos los baños son completos, con ducha y bañera.